No obstante no viene mal recordar algunas precauciones:
- Nunca debe enfrentarse uno a un perro que supuestamente tiene una actitud previa al ataque: orejas altas, rabo elevado y con la mirada fija.
- Si el perro tiene el rabo bajo es porque está asustado procura evitarle, puede reaccionar violentamente por puro instinto de conservación.
- No tirarle nada con la mano por encima de la cabeza, ya que lo puede interpretar como una amenaza.
- Si te cruzas con un perro, disminuye la velocidad de carrera y no le pierdas de vista, evitando mirarle fijamente a los ojos, ya que puede interpretarlo como amenaza por tu parte. En mi caso particular, reduzco el ritmo de carrera e ignoro su presencia.
- Si se acerca, paraté, no le grites ni intentes huir, deja que te huela y se tranquilice. Nunca le mires a los ojos.
- En caso de ataque, no corras, es más rápido, protege tu cuello y si te tira al suelo agrúpate y protege la cabeza.
- No muestres miedo, los perros notan esa circunstancia. Tampoco un exceso de enfrentamiento en tu actitud. Simplemente intenta no implicarte directamente con el anima. Ignóralo.
- Procura no correr en la misma dirección que su amo, el perro lo puede interpretar como una amenaza hacia el y puede intentar una actitud de protección.
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